Hace apenas cuatro días partió al cielo nuestra querida Mercedes Valera, madre de Marivic.
Ha sido muy triste verla ir de esa manera, «murió de mengua» como dice el vulgo…
Para comenzar, falleció el mismo día que lo hizo el presidente de Venezuela, por lo tanto, no tienen idea lo difícil que fue conseguir cada documento legal necesario para poder darle sepultura, ya que los entes públicos estaban de duelo y no dejaron a nadie de guardia como para cumplir con este papeleo. Todo esto sin contar que su cuerpo pasó 37 horas sin refrigeración en la morgue del Hospital porque las cavas están dañadas.
Después de ésto nos encontramos en la siguiente encrucijada…
…No tenemos dinero para inhumar a Mercedes. ¿Qué hacemos?
De inmediato avisé a mis amigos de la Alcaldía, de la Fundación Social Caroní, quienes en todo momento, desde que se enteraron del caso completo, se dieron a la tarea de apoyar en casi todo, o mejor dicho, en lo principal y lo que está a su alcance darle a Marivic.
De ipso facto recibimos el apoyo de Elena Merciet de la Fundación, Reina Cuotto del Módulo del Seguro Social, Arme Vallina, el Dr. Carlos Yépez de la Alcaldía, Richard Castillo, Lucía, sra Aida de las damas de la iglesia Centro Cívico, entre otras personas.
Gracias a la colaboración de ellos, finalmente pudimos enterrar el cuerpo de Mercedes, con la excelentísima participación de la señora Aída, del grupo de oración católico «Jesús de la Misericordia», quien cantó y oró de la manera más bella para darle el último adiós a Merche.
Les confieso que muchísimas veces me ha tocado escribir sobre familiares y amigos fallecidos, pero en esta oportunidad no salgo de mi asombro, todo se mueve en mi mente como una película, son muchos los recuerdos desde niña junto a Mercedes, siempre con altibajos por su condición psicológica y mental, condición que muchos JAMÁS entendieron al llamarla loca y sacarla de sus vidas por el simple hecho de no ponerse en su posición. Pero con los recuerdos más divertidos de sus chistes, su excelente memoria para recordar números telefónicos y fechas especiales. Debo confesarles que desde que tengo uso de razón, Mercedes jamás dejó de felicitarme en mis cumpleaños, como tampoco lo hizo su madre, quien cada año me obsequiaba tan divinas tortas… ¡Cómo extraño tal gesto!
Pero ya todo pasó, atrás quedaron todos esos momentos, los buenos y los malos. Ya pasó…
Hoy queda viva Marivic y es por ella que vamos a dar lo mejor de nosotros, aunque en el camino siempre nos encontremos con personas sin alma que desean el mal ajeno, mienten sin límites, roban a los fallecidos y caen en chismes que sólo consiguen hundirlas a ellas mismas; pseudo seres humanos que escudándose en el Cristianismo y el Evangelio hace daño físico y moral a quienes no merecen tal maltrato.
Como leí por allí alguna vez: «De buenas intenciones está empedrado el camino del infierno».
Muchas personas se acercan a la casa de Marivic a supervisar, opinar y pensar que porque uno es agradecido, pues, debe aceptar el entrometimiento de toda la ciudad en algo que legalmente sólo le atañe a esa familia, es decir, los Valera.
Sin embargo, lo que vamos a destacar son las buenas acciones de quienes dan lo mejor de sí mismos y le brindan apoyo incondicional a nuestra querida Marivic. Son estas personas las que sí brillan y dan luz a quienes estás a su lado.
Es por ello que doy las gracias y les pido, a todos ustedes que leen este blog, que si creen en Dios, eleven una plegaria por Marivic y por el eterno descanso de Mercedes Valera.
GRACIAS
Llenando planillas junto a Lucía en la Alcaldía
Junto a Elena y Lucía recibiendo donación para Mercedes
Junto a Elena recibiendo la ayuda para Marivic de parte de la Fundación Social Caroní
marivicvalera 